Cada fotografía es un instante que decidió quedarse. 
Un destello de luz, una sombra, un silencio que habló más fuerte que las palabras.

Aquí no hay categorías ni fronteras, solo aquello que me detuvo, que me hizo respirar más lento, 
que me recordó que el mundo es más vasto de lo que alcanzo a entender.

​​​​​​​​​​​​​​Quizá, mientras las miras, encuentres algo de ti en este recorrido.